EDUCACIÓN

Los primeros años de la infancia son vitales para el proceso de aprendizaje y lamentablemente muchos niños no alcanzan su potencial cognitivo por la desigualdad en la oferta educativa.  Aunque el Estado de cualquier país debe garantizar el acceso gratuito a la educación, las posibilidades de las familias de escasos recursos no alcanzan a cubrir el pago de una matrícula escolar, los gastos en accesorios, por ejemplo los uniformes y los materiales escolares.

Una encuesta reciente realizada en Sao Paulo (Brasil), Casablanca (Marruecos), y Lagos (Nigeria), mostró que las familias de menores ingresos gastaron más de una cuarta parte de sus ganancias en la educación de sus hijos. Pese a todos los gastos y esfuerzos que esto supone, con demasiada frecuencia los logros educativos de los jóvenes no culminan en un empleo adecuado.

El difícil acceso a las escuelas lleva a las familias a elegir entre pagar para que los niños puedan asistir al colegio o retirar por completo a sus hijos de la escuela.