Informe de Lectura - Cómo escribir para la web ¡ Use la pirámide invertida!

Una estructura tradicional es la que hoy se sugiere para escribir en la web, la pirámide invertida como lo propuso Roy Peter Clark en su listado de Maravillas del mundo periodístico “ha pasado la prueba del tiempo, como las pirámides de Egipto”[1]. Esta técnica narrativa parece ser bastante simple, pero requiere el manejo del concepto de estratificación de la información.

La pirámide invertida condensa elementos básicos del periodismo como lo son el lead, los párrafos de contexto, las referencias y el material complementario. Su presentación es un ejercicio de jerarquización de la información, consiste en que la información más importante encabece el texto y de ahí se vayan desprendiendo datos en orden decreciente de relevancia.

Esta forma de presentación de contenidos marca diferencia con la estructura de otros textos, como los artículos científicos o los fallos de una corte de justicia; mientras que en éstos los datos de mayor preponderancia sólo son revelados hasta el final, en la pirámide invertida ocupan las primeras palabras de la redacción.

Puede decirse que la pirámide invertida es la técnica narrativa ganadora en la web, porque se complementa con este formato; su estructura le permite en primer lugar mostrarle al lector el hecho más importante y esto es altamente aceptado por la premura con que un cibernauta lee en internet según el EyeTrack III, “menos de un segundo es lo que se requiere para que un título capte la atención del usuario”[2]. En segundo lugar, se ajusta a los criterios de longitud que demanda la web, según Crawford Kilian, por ejemplo, se debe “‘pedacear’ o romper la información en segmentos que no tengan más de 100 palabras”[3].

La estructura de la pirámide invertida puede variar, ésta puede ser un texto lineal colocado en una misma página web, lo que ayuda a una jerarquización de los elementos; un texto lineal dividido temáticamente, es decir, “el usuario podría escoger el subtema de su interés al escanear el texto, a partir de su exposición en el primer pantallazo”[4]; texto lineal dividido en subtemas que aparecen en diferentes páginas Web, en este nivel es el usuario quien determina la jerarquización de la información, impera los enlaces, la hipertextualidad.

Y hablando de hipertextos, una de las cuantiosas ventajas que ofrece es la estratificación de la información, el poder empezar con información relevante que será ampliada con enlaces que ofrecen información complementaria es un beneficio indudable.

Otros aspecto a tener en cuenta cuando se usa la pirámide invertida es la titulación, para esto hay varios modelos, Nielsen propone en su artículo ‘La voz pasiva es redimida para los titulares Web’, las siguientes recomendaciones:                                                  

 - No use las mismas palabras iniciales en el título y en el sumario.

- “Usted tiene 4 palabras para ir al punto, así que use 4 palabras diferentes”.

- Evite repetir cualquier palabra del titular en el sumario, excepto para una o dos palabras clave[5].

Para concluir cabe resaltar estas palabras de Guillermo Franco cuando habla de cómo hacer que un texto encabece los listados de resultados en un motor de búqueda; “El ejercicio de jerarquización que se realiza cuando se construye la pirámide invertida, si es correctamente hecho, termina colocando lo más cerca posible las palabras que definen de qué es el texto, sobre qué trata”[6].